Como parte de las conclusiones de la jornada del 7° Congreso Nacional en Seguridad Vial de la Asociación Nacional de Transporte Privado ANTP, Alex Theissen Long, Presidente de la Mesa Directiva de la ANTP, se pronunció por la creación de un estándar o una certificación que permita profesionalizar a los operadores en seguridad vial.
“Hemos decidido generar en conjunto con nuestros amigos transportistas una manera de generar un currículum avanzado para los capacitadores de los propios operadores. Crear un estándar, una certificación que nos permita profesionalizar, no solo sacar más operadores buenos, sino profesionalizarlos. Vamos a trabajar como ANTP en conjunto con la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) y con los organismos que se quieran sumar”, afirmó Alex Theissen durante la clausura del congreso, celebrado del 14 al 16 de agosto.
Este trabajo también abarca el desarrollo de una agenda que incluya atender los problemas en salud que enfrentan los conductores y cómo atraer, desarrollar y retener al nuevo talento. La ANTP se compromete a hacer un cambio de la imagen que se tiene de los operadores y de la industria, aseguró Alex Theissen.
Respecto a las leyes que actualmente no se aplican para regular los cerca de 7 mil puntos de cruces de ferrocarril que existen en el país y que forman parte del entorno urbano, Alex Theissen pidió a la industria del transporte privado ser realista y proactiva para resolver el problema, pues dijo que los verdaderos expertos están en las empresas.
Sobre el punto de que la fatiga es uno de los principales factores que intervienen en los accidentes viales, Theissen Long indicó que las empresas del transporte privado “debemos aprender a incorporar un curso de administración de fatiga que nos permita entender más las causas de los accidentes, inclusive del porqué de la deserción del operador”.
En el último día de actividades se llevó a cabo la mesa panel denominada “La inversión en seguridad vial y su impacto en el ámbito empresarial”, en donde Daniel Montañez, Gerente de Logística y Distribución de ANTP, citó datos del Instituto Mexicano del Transporte (IMT) que revelan que durante 2022 se registraron 14 mil siniestros en carreteras federales en México, con un saldo de 7 mil 247 lesionados y 2 mil 420 muertos, en el que estuvieron involucrados 22 mil 745 vehículos; de estos, solo un 25.8% son unidades de carga.
Precisó que, aunque el sector transporte de carga tiene una participación menor en dichos siniestros, debe estar ocupado en este tema y agregó que “desde la ANTP estamos alineados al objetivo del Segundo Decenio de reducir al menos 50% las muertes generadas por los accidentes viales: desde hace más de 24 años se han generado iniciativas como el Premio Nacional de Seguridad Vial (PNSV); desde hace siete años se desarrolló el Congreso Nacional en Seguridad Vial y recientemente se creó TrackSIM, el simulador de manejo”.
Explicó que el PNSV está alineado al ISO 39001 y provee una metodología para aplicar una mejora continua en dos vertientes: que las empresas puedan gestionar en seguridad vial y capaciten a los operadores. Sobre el Congreso Nacional de Seguridad Vial, destacó que ha sido un promotor del encuentro entre autoridades, instituciones y empresas usuarias para compartir las mejoras prácticas en seguridad vial.
De TrackSIM, dijo que al ver la buena práctica de algunas empresas que empezaron a hacer uso de un simulador de manejo para capacitar a sus operadores, la asociación decidió replicar este modelo con el objetivo de ver qué se puede hacer cuando el operador está al frente del vehículo de carga.
Por su parte, Salvador Saavedra, Presidente del Sector de la Industria Automotriz de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA), enfocó su charla hacia la importancia del desarrollo en México de los estándares PBS, un marco regulatorio en seguridad vial que establece requerimientos de desempeño en lugar de recetar diseños específicos.
Saavedra desglosó que PBS promueve el desarrollo de un nuevo estándar seguro, eficiente, que reduzca el impacto ambiental y que brinde beneficios económicos, y subrayó que se requiere la NOM-012 para que se pueda transitar al sistema PBS, por lo que propuso evaluar al interior de las organizaciones de transporte y en la industria de vehículos la conveniencia de esta transición.
“Hay que mejorar la eficiencia del sistema de transporte al optimizar las configuraciones vehiculares, ya que con una mejor estabilidad y mejor maniobrabilidad se reduce el riesgo de accidentes. Debe existir una eficiencia en distribución de los pesos que resulta en una reducción de consumo de combustible”, indicó Salvador Saavedra.
En esta misma mesa panel, Omar Tenorio, líder de Estrategia de Holcim México, hizo un llamado a las empresas a evaluar cuánto les cuesta un accidente de tránsito, pues dijo que existen muchos costos alrededor de éste, empezando por las reparaciones menores y las pérdidas totales de las unidades. “No se le puede poner costo a la pérdida humana, aquella persona que priorice tiempo de entrega frente a una vida humana, no tiene un compromiso claro de responsabilidad social”, enfatizó.
Ante esta circunstancia, Omar Tenorio propuso incluir a los profesionales financieros y de operaciones de las compañías en las estrategias de la distribución de la mercancía para que, sobre esa base, se definan tiempos de entrega adecuados y haya mayor apertura con el conductor. ¿Qué sigue después de la tecnología?, la psicología del transporte porque hay que ver qué está sucediendo dentro de la cabina y evaluar si un conductor es propenso a ser agresivo”, señaló.
En la mesa panel “Cruces a nivel ferroviario” se abordó la seguridad vial desde la perspectiva de la convivencia del autotransporte, el ferrocarril y los usuarios de las vías públicas. Geraldine López Martínez, Coordinadora de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles (AMF), documentó que en México existen 26 mil kilómetros de vías férreas, 7 mil cruces a nivel y cada día hay dos accidentes de transporte pesado al cruzar las vías del tren.
Destacó que esa asociación promueve la difusión de una cultura de seguridad en el uso de vías férreas a través de cápsulas informativas que concienticen a toda la población y recientemente realizó una alianza con WAZE, en donde la aplicación alerta al automovilista cuando se acerca a un cruce ferroviario.
Geraldine López comparó que las distancias de frenado en metros desde que se acciona el freno hasta que el vehículo se detiene por completo, varía en cada modo de transporte: un automóvil regular cuando va a 90 kilómetros por hora necesita 57 metros, este mismo auto en lluvia necesita 89 metros; un camión requiere 90 metros; un tráiler requiere 100 metros para frenar; y el ferrocarril necesita entre 1500 y 2 mil metros para lograr frenarlo.
En tanto, Fernando Madrid, Subgerente de Seguridad Operativa de Ferrocarril Mexicano (Ferromex), dimensionó que 45% de los accidentes que se presentan en los cruces a nivel se realizan con vehículos de autotransporte de carga o de pasajeros, según datos estadísticos de su empresa.
En ese sentido, instó a los transportistas a atender el reforzamiento de las distancias que requieren los vehículos en los cruces ferroviarios y a considerar las condiciones técnicas de sus unidades como los frenos y las llantas, pero también tomar en cuenta las condiciones de las vialidades.
Por su parte, Francisco Kim, Vicepresidente del Sector Multimodal de ANTP, informó de la aplicación S-MAP, la cual nació con el objetivo de cumplir con la norma oficial mexicana NOM-012-SCT-2-2017 de pesos y dimensiones.
“Es un mapa de geolocalización especializado en caminos y carreteras de México, basado en dicha norma y con él estamos llegando a varias capas como el transporte ferroviario. La cooperación que podamos lograr las empresas de transporte privado con las de transporte ferroviario será un trabajo en conjunto, y también participar en la capacitación para la población en general que transita por los cruces peligrosos”, expuso Francisco Kim.
Finalmente, en el último panel “Operadores e instructores (desafíos del factor humano en la seguridad vial)”, Gerardo Jiménez, Director General de Transportes Pilot, describió que entre los pilares que rodean al operador destaca el capital humano, por lo que recomendó a las empresas analizar cuáles son sus procesos de reclutamiento para conformar un área robusta.
“Hay que proporcionarle al operador las herramientas para que conozca a la empresa, de esta forma va a ser más fácil su proceso de adaptación. Anteriormente, muchas empresas no contaban con servicio médico, hoy es un must tenerlo, tener un psicólogo en la empresa para que el operador sea escuchado y tratado”, consideró Gerardo Jiménez.
Berenice Reséndiz Márquez, Jefa de Transporte, y Edgar Romero López, operador e instructor de Bimbo, coincidieron en la importancia que juega el papel de la psicología del operador en el autotransporte y cómo las empresas están invirtiendo cada vez más en materia de inclusión laboral.
“Para Grupo Bimbo se ha formado la Escuela de Transportes de mujeres y de hombres, tenemos 21 mujeres egresadas. Significa expandir la mente y ver las necesidades en general, hay mujeres que quieren participar y la inversión que se tiene que hacer en los términos de inclusión es importante; toda capacitación es una inversión no un gasto”, expresaron los directivos.
Rubén Arcas, Director Comercial de TrackSIM, abundó que este centro de capacitación móvil va al patio de las empresas y está basado en simuladores de manejo para apoyar la profesionalización de las y los operadores. Del 30 de marzo 2022 a la fecha se han capacitado e incrementado las habilidades de mil 945 participantes, se ha recibido la visita de mil 350 personas de la población en general y se han impartido cursos básicos y avanzados.
Acerca de las condiciones de salud con la que cuentan los operadores, Raúl Monroy Reus, Director General de Transportes Monroy Schiavon, refirió que gracias a una muestra realizada a cerca de 2 mil 500 operadores en los últimos 12 meses, se encontró que solo el 14% está sano; el 66% tiene padecimientos en niveles aceptables; y el 20% tiene condiciones de alto riesgo.
“Tenemos una industria enferma, ¿qué consecuencias tiene en la conducción diaria?: hay una propensión a la fatiga, ya que el sueño genera baja de capacidad cognitiva, lleva a incrementar el estrés, lo que provoca un círculo vicioso y esas condiciones llevan a ingerir sustancias dañinas, al consumo del tabaquismo, cafeína y bebidas energéticas”, consideró Raúl Monroy.
Para concluir, Julio Rojas, Instructor de Seguridad Vial de Sigma Alimentos, explicó que al interior de su empresa se ha diseñado un programa con base en la salud de los conductores: a los que ya tienen enfermedades crónico degenerativas se les aplica un programa de seguimiento con su seguro social y al interior de la empresa y no se les asignan viajes largos.
“Es importante que a la nueva creación de conductores se les fomente una cultura diferente en donde el deporte sea un factor fundamental de su vida diaria, es responsabilidad de todos no solo quienes se dedican al transporte”, concluyó Julio Rojas.
