A partir del año 2020, derivado de la pandemia declarada por el COVID-19, el mundo ha experimentado grandes cambios en la convivencia social, laboral, escolar, recreativa, etc., lo que ha propiciado, entre otras situaciones, un aumento acelerado del número de usuarios de internet, pasando de 3.366 millones en 2015 a 5.053 millones de usuarios en 2020 en todo el mundo[1]. En el mismo año, el número de usuarios de internet en México ascendió a 84.1 millones (el 72.0% de la población), de los cuales el 78.3% se ubican en áreas urbanas, mientras que en el área rural la proporción es de 50.4%[2].
El incremento en el número de usuarios de internet impulsó un crecimiento exponencial del comercio electrónico, principalmente en las grandes ciudades, debido a la facilidad para adquirir bienes sin salir de casa y sin importar dónde se producen o se almacenan, sin embargo, los bienes producidos requieren ser transportados lo que conlleva grandes retos para que la movilidad de personas y carga continúe realizándose de forma segura, eficiente y amigable con el medio ambiente.
Aunado a lo anterior, la tendencia poblacional se mantiene, de acuerdo con el Banco Mundial “hoy en día, alrededor del 55 % de la población mundial, 4200 millones de habitantes, vive en ciudades. Se cree que esta tendencia continuará. En 2050, la población urbana se duplicará, y casi 7 de cada 10 personas vivirán en ciudades.”[3]
En México En 1950, “43 % de la población vivía en localidades urbanas; en 1990 el porcentaje era de 71, para 2020 es de 79 por ciento”[4], por lo que se observar que de mantenerse la misma tendencia que las cifras mundiales, para 2050 existirá una mayor concentración de personas en las principales ciudades de México, las cuales demandarán una mayor cantidad de bienes nacionales e internacionales y un mayor manejo de desechos contaminantes.
De la misma forma que el aumento del comercio electrónico, el aumento de la demanda de bienes requiere producirlos y transportarlos. Por ello, la industria, la logística y el transporte de carga, entre otros, pueden marcar la diferencia, ya que son sectores claves asociados a satisfacer dichas necesidades, a través de la optimización de las cadenas de suministro, la tecnología y la capacitación para volverse más eficientes, seguros y amigables con el medio ambiente.
Por lo anterior, podemos observar que el comportamiento poblacional y del comercio electrónico, además de su relación con la economía, están estrechamente vinculados con la movilidad de la carga por lo que cualquier variación en ellos presentan diversos desafíos que se deben atender para mantener las mejores condiciones en seguridad, eficiencia y cuidado del medio ambiente. Particularmente ante el aumento de una mayor demanda de mercancías en las ciudades, se requiere una flota vehicular adecuada y con un consumo de energía adecuado por lo que, en el año 2004 la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés), lanzó el programa público voluntario denominado SmartWay para ayudar a las empresas a promover la sustentabilidad de la cadena de suministro al medir, comparar y mejorar la eficiencia del transporte de carga.
Seis años después de la puesta en marcha del programa SmatWay en Estados Unidos, la EPA inició a trabar con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), su contraparte en México, para ayudar y promover la sustentabilidad de la cadena de suministro. En 2010, con orientación de la EPA, la SEMARNAT creó y lanzó el programa “Transporte Limpio”, el cual se basa en el diseño del programa SmartWay. Desde entonces, la SEMARNAT opera el programa con la finalidad disminuir la huella de carbono al promover que las empresas usuarias del transporte y empresas que prestan el servicio de carga adopten buenas prácticas para la reducción del consumo de combustible y de las emisiones de gases y compuestos de efecto invernadero y contaminantes criterio (óxidos de nitrógeno y partículas), basadas en la implementación de estrategias, tecnologías y capacitación.
Es un programa voluntario que busca que las empresas participantes sean más sustentables, seguras y eficientes, aumentando con ello la competitividad del sector.
Los principales objetivos del programa Transporte Limpio son:
La SEMARNAT promueve medidas que pueden ser adoptadas por las empresas para que se vea reflejado como beneficio en el consumo de combustible y la reducción de emisiones, las cuales van desde:
Actualmente el programa Transporte Limpio tiene cerca de 617 empresas adheridas entre transportistas, empresas usuarias y proveedoras, entre ellas empresas socias de la ANTP como Barcel, Bimbo, Pilot, Bioppapel, Oxxo, Cervecería Cuauhtémoc Moctezuma, Coca-Cola FEMSA, Grupo Lala, Jumex, Fábrica de Jabón la Corona, Fletes Hesa, Grupo Modelo, El Palacio de Hierro, por mencionar algunas. En 2021, 259 empresas fueron reconocidas, 25% más que en 2020 (207 empresas). Sobresalieron 30 empresas en 2021, son las que obtuvieron el mejor desempeño ambiental (kgCO2emitido/tontransportada.kmrecorrido ) en las categorías contempladas en el programa:
Los requisitos para sumarse al programa Transporte Limpio consisten en:
Basado en los resultados del programa “Transporte Limpio”, cuya metodología ha sido tomada de una buena práctica internacional, ANTP seguirá impulsando que las autoridades federales, estatales y municipales trabajen de forma conjunta en la mejora continua del programa, con el objetivo que sea reconocido como una forma de autorregulación ambiental dentro de los programas de verificación obligatoria de los estados y municipios, ya que sin duda esto generará incentivos para que más empresas se sumen al programa como una forma más efectiva de contribución y contrarreste la imposición de políticas de cobros, restricciones, prohibiciones o sobrerregulación administrativa para la operación del transporte de carga.
Sin duda, sectores como la industria, la logística y el transporte de carga son actores importantes para satisfacer las necesidades generadas por el aumento de la población urbana y la demanda de los bienes de consumo, y para mantener un equilibrio entre la eficiencia y el cuidado del medio ambiente pocos son los programas que han demostrado tener resultados favorables por lo que invitamos a todas las empresas usuarias del transporte de carga o empresas que prestan el servicio de carga, que aún no forman parte de la iniciativa, a sumarse a este esfuerzo que traerá a su operación y difundir los resultados favorables sobre la eficiencia, competitividad y cuidado del medio ambiente.
Fuente: SEMARNAT/Programa Transporte Limpio
[1] Internet World Stats. https://www.internetworldstats.com/emarketing.htm
[2] COMUNICADO DE PRENSA NÚM. 352/21INEGI. https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/boletines/2021/OtrTemEcon/ENDUTIH_2020.pdf
[3] Banco Mundial. Entendiendo a la pobreza/Temas/Desarrollo urbano (i). https://www.bancomundial.org/es/topic/urbandevelopment/overview#1
[4] Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Cuéntame de México. Población rural y urbana. http://cuentame.inegi.org.mx/poblacion/rur_urb.aspx?tema=P