El 25 de septiembre de 2015 más de 150 líderes mundiales asistieron a la Cumbre de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible en Nueva York con el fin de aprobar la Agenda para el Desarrollo Sostenible. El documento final, titulado “Transformar Nuestro Mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”, fue adoptado por los 193 Estados Miembros de las Naciones Unidas. Dicho documento incluye los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) cuyo objetivo es poner fin a la pobreza, luchar contra la desigualdad y la injusticia, y hacer frente al cambio climático sin que nadie quede atrás para el 2030.[1]
Los ODS tratan de ir más allá para poner fin a la pobreza en todas sus formas. Presentan la singularidad de instar a todos los países a adoptar medidas para promover la prosperidad al tiempo que protegen el planeta, deben ir de la mano de estrategias que favorezcan el crecimiento económico y aborden una serie de necesidades sociales, entre las que cabe señalar la educación, la salud, la protección social y las oportunidades de empleo, a la vez que luchan contra el cambio climático y promueven la protección del medio ambiente.
A través de la redacción de dichas estrategias el Sistema de las Naciones Unidas, a nivel mundial y en México, plantea las acciones requeridas para focalizar la cooperación y programación para promover y ejercer la protección del medio ambiente.
En México como en el mundo, el transporte de carga tiene un importante reto y oportunidad para poder contribuir al cumplimiento de los ODS. Particularmente en México el 56.2% de las mercancías en el país se mueven por autotransporte[2] por lo que se considera un sector fundamental como columna vertebral de la logística, sin embargo, el parque vehicular del autotransporte de carga actualmente ronda los 19.99 años en promedio de antigüedad [3], provocando, entre otras muchas problemáticas, un mayor consumo de combustibles y en consecuencia una mayor emisión a la atmosfera de gases de efecto invernadero y contaminantes criterio, por lo que en el sector autotransporte de carga existe una gran oportunidad de contribuir con la disminución de las emisiones contaminantes mediante la reducción de la edad promedio de los vehículos de carga, que permita el uso de tecnologías postratamiento de los gases o la introducción de nuevas energías limpias y renovables, y con ello, impulsar como país el cuidando el medio ambiente.
De forma específica, el objetivo 8 trabajo decente y crecimiento económico, en su la meta 8.3, menciona que se deben promover políticas orientadas al desarrollo que apoyen las actividades productivas, la creación de puestos de trabajo decentes, el emprendimiento, la creatividad y la innovación, y fomentar la formalización y el crecimiento de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas, incluso mediante el acceso a servicios financieros.
Dentro del autotransporte de carga en México, las micro y pequeñas empresas representan más del 50% de la estructura empresarial, por lo que se considera que son una de las mayores oportunidades para poder impulsar la modernización de su flota vehicular, mediante programas que permitan realizar esta transición, ya que México y el mundo requieren de una logística cada vez más eficiente y menos contaminante.
Por ejemplo, en países de Europa como España existe el Programa de transformación de flotas de vehículos pesados de transporte profesional por carretera cuyo principal objetivo es descarbonizar y digitalizar la movilidad para mejorar la calidad del aire en las ciudades y mitigar el ruido, las emisiones y la siniestralidad y cuya vigencia es hasta el 30 de abril de 2024.[4]
En el caso de México, desde la Secretaría de Economía, la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, se impulsaron diferentes iniciativas como:
Actualmente, la continuidad de dichos programas no se contempla en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF). Pero es indispensable que desde el gobierno federal se diseñen y ejecuten programas dirigidos a la renovación del parque vehicular del autotransporte federal.
También es necesario considerar la periodicidad y alcance de los incentivos para la renovación vehicular, en beneficio de las micro y pequeñas empresas, sobre todo ante un periodo de incertidumbre que provoca desaceleración de la productividad del sector.
Recientemente, Nacional Financiera (Nafin) lanzó el Programa de Financiamiento al Transporte Sostenible,[8] que busca beneficiar a las micro y pequeñas empresas del sector transporte de carga, así como a comerciantes y prestadores de servicio con flota propia para la distribución de productos o la prestación de servicios, el cual tiene el objetivo de promover la renovación del parque vehicular a través de financiamiento.
Los sujetos de crédito deberán contar con una antigüedad de entre 15 y 25 años
en el sector de transporte de carga, que pueden ir desde pickup, camionetas, camiones de 3.4 hasta 5 toneladas; de Diésel Euro V, Diésel Euro VI, híbridos y eléctricos.
Este Programa de Nafin podría traer una gran oportunidad para reducir la edad promedio de la flota de autotransporte en México además de traer beneficios para las empresas al contar con un vehículo nuevo ya que aumenta seguridad vial, reduce gastos, y minimiza emisiones, sin embargo, aún faltan muchos más incentivos del gobierno para que esto se logre en un tiempo razonable, de lo contrario pasarán muchos años sin que podamos ver la contribución en la reducción de emisiones contaminantes desde el sector autotransporte de carga.
La Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), como parte de su compromiso de elevar la productividad y competitividad del autotransporte de carga, ha presentado propuestas para que los esquemas tradicionales de renovación, consideren la posibilidad de que las empresas micro, pequeñas y medianas puedan adquirir los vehículos seminuevos con tecnología y un buen mantenimiento a lo largo de su servicio que las empresas con flotas privadas renuevan constantemente derivado de políticas internas, aún y cuando son vehículos en perfecto estado, ya que estos vehículos se encuentran en condiciones para seguir trabajando en perfecto estado, incluso podrían aún estar certificados por las propias armadoras, permitiendo que las empresas micro, pequeñas y medianas, principalmente, puedan tener una transición a nuevas tecnologías de una forma gradual y progresiva.
Pese a los riesgos que representa la circulación de unidades ya en obsoletas condiciones para circular, no existe la cultura de la renovación, ni programas o incentivos que la impulsen en la mayoría de las entidades del país y muy pocas autoridades han apoyado y puesto las condiciones para que se dé la renovación.
Si se formula un esquema de renovación adecuado se podría mejorar la calidad de vida de las personas en materia de salud y cuidado del medio ambiente ya que se tendría en circulación unidades nuevas y con nuevas tecnologías reduciendo las emisiones contaminantes, esto permitiría que México avanzara en el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenibles, los cuales como ya se ha mencionado, buscan poner fin a la pobreza, luchar contra la desigualdad y la injusticia, y hacer frente al cambio climático sin que nadie quede atrás.
[1]Economía Social y Objetivos de Desarrollo Sostenible
[2] Dirección General de Autotransporte Federal/Estadística Básica del Autotransporte Federal 2021
[3] ESTADÍSTICA MENSUAL
[4] Programa de transformación de flotas de vehículos pesados de transporte profesional por carretera
[5]DECRETO por el que se otorgan diversos beneficios fiscales a los contribuyentes que se indican.
[6]DECRETO por el que se fomenta la renovación del parque vehicular del autotransporte.
[7]DECRETO por el que se modifica el diverso por el que se fomenta la renovación del parque vehicular del autotransporte, publicado el 26 de marzo de 2015.
[8] Programa de Financiamiento al Transporte Sostenible.
